SOFÁS ORIGINALES

Mirad que sofás he encontrado por la red, son diferente y originales, pero cómodos no se si serán:


Este se llama Sofá Lego. La comodidad no se si la tendrá escondida, lo único que puedo encontrarle bueno, es que puedes poner los módulos como más te gusten.


Esto también es un sofá aunque cueste creerlo.
A simple vista parece una alfombra, pero parece ser que es muy versátil. Como podéis ver, puedes tumbarte encima, dentro y modelarlo, además parece muy mullidito.



Estos dos me han parecido muy divertidos para las habitaciones de los enanos. El primero parece hecho más para habitaciones de niños y es una especie de réplica de un helicóptero, y el segundo más para niñas, a lo princesitas.
Me encantan con sus colores tan vivos y redondeados, para que nuestros pequeños no se hagan daño al tirarse en ellos. Cuestan, respectivamente, el primero 350 euros y el segundo 390, bueno, un caprichillo para los reyes y reinas de la casa.


Este, visto de esta manera, ya de por si nos parece original por su corte y diseño, pero fijaros en la foto de abajo, a ver que opináis:


Es increíble, a mi, mas que un sofá me recuerda a una mesa, pero como en gustos no está nada escrito...
Funcional no se si será pero desapercibido no pasará si ponéis alguno en vuestras casas.


Este es ideal para la terraza o el jardín. A mi me encanta el Mimbre y el Ratán, me parecen materiales muy nobles, y para el exterior, me dan la sensación de frescura y calidez al mismo tiempo.
Pero sin lugar a dudas me evocan las tardes de sol en verano, en la terraza, patio o jardín, tomando una bebida fría, con una copa bien grande, con el borde endulzado de azúcar y acompañada de mi mejor amigo, mi pareja.


A esto, la verdad es que no se como llamarlo, aunque si tiene nombre, Buldang. Se trata de un tubo acolchado y moldeado a modo de salchichas. Se le pueden dar todas las formas que seamos capaces de imaginar, pero la verdad, y es mi opinión personal, no me parece ni un sofá ni un puff ni nada que se parezca, vamos, que me parece de lo más feo que he visto, pero como he dicho antes, para gustos los colores...


Ahhhh, y como no, el diseño es original de un Japonés.
Si es que los japoneses tienen una imaginación.....tolerancia les faltará, pero imaginación seguro que no.


Este es uno de mis favoritos. Está pensado, tanto para una como para dos personas. Los accesorios de los lados son opcionales, pero sin duda, de lo más prácticos. Se puede hacer en varios colores, no sólo en naranja, y el material, es piel.
Es ergonómico para que nos recoja bien toda la espada y la zona lumbar, de lo que estoy segura es que si yo me tumbara en él, con el portátil en un lado y un refresco en el otro, no me levantaría, fijo, fijo.
Os pongo la dirección por si queréis entrar en la página.
www.domoking.com



Este también me gusta, porque me recuerda a los materiales que antes os comenté, pero no nos dejemos engañar, es de material plástico, creo recordar.
Sin embargo en los laterales, esos huecos que vemos me parecen muy atractivos y diferentes, así como por debajo del asiento.
Mis perras, seguro que disfrutarían un montón escondiéndose por dentro, o jugando con sus pelotas, jajaja.


Si no nos gusta tirar esas latas que solemos beber todos, una opción es usarlas para realizar este sofá.
A mi parecer le faltan unos cojines para que sea un poco mullido, porque así no creo que nadie quiera echarse la siesta. Bueno, por lo menos en este artilugio no pasaremos sed, jajaja.




Con este, sencillamente, me quedé sin palabras.
Que tenemos todos esos peluches de nuestros retoños, que ya han dado el estirón pero nos da una pena terrible tirarlos, porque siempre nos evocan recuerdos tan bellos, que pensamos que si los tiramos es como tirar un pedacito de nuestra vida, pues ya tenemos la gran solución, RECICLAR.
La técnica no se cual será para conseguir que queden tan unidos y darle la forma que queremos, pero de lo que no tengo ninguna duda es que ahí si que haría esas siestas tan típicas españolas, y estoy segura que arropadita por ositos si me sentiría, como cuando era una niña, vamos.