CULTIVAR NUESTRO PEREJIL

Todas las plantas aromáticas que tenía en la ventana de la cocina ya pasaron a mejor vida, hace tiempo, así que estoy pensando en volver a comprar algunas pequeñas, ahora que parece que el invierno y el frío se nos alejan poco a poco.

La primera que quiero comprar por enésima vez, es el perejil. Tengo unos cuantos libros sobre plantas, pero, aún así, he buscado información sobre sus cuidados, para ver si esta vez, consigo que dure más tiempo.

La verdad, es que es una gozada abrir la ventana y coger tu propio perejil, cuando nos hace falta para nuestros guisos, así que no renuncio a volver a tener mi pequeño huerto de plantas culinarias.

Conozco dos tipos de perejil, el de la foto de arriba, de hoja plana y el de hoja rizada, el de la izquierda. A mi, personalmente, me gusta mas el de hoja lisa, pero eso es a gusto de cada uno.
Tengo mucha costumbre de usar perejil, prácticamente para todos los guisos, y se nota muchísimo la diferencia entre el desidratado, que es el que ahora uso, y el fresco, en el aroma, lo primero.

Se que es bueno por sus cualidades medicinales, pero nunca me había parado a pensar cuales serían, así que de paso me he documentado un poco sobre el tema.

Parece ser, que entre sus múltiples cualidades, podemos contar las siguiente:

• Favorece la digestión y abre el apetito.
• Diurético.
• Mitiga los dolores de la menstruación.
• Afrodisíaco.

Para notar los efectos beneficiosos de esta planta, tendríamos que tomarlo en infusión, pero al incluirlo en las cocciones, obtenemos algunas de sus estupendas propiedades.

Como uso externo, nos podemos encontrar sus usos como:

• Colirio ocular.
• Alivia los dolores musculares, usado en cataplasmas.
• Contra dolores de oído y muelas.
• Relajante.
• Combate la halitosis si masticamos hojas frescas.

La situación mas conveniente, sería ponerlo expuesto al sol solamente unas horas del día, a ser posible, evitar las del medio día y primeras de la tarde que son las mas fuertes, aunque puede estar a pleno sol durante todo el día.

Hay que mantener el sustrato húmedo pero sin estar encharcado, así en verano, dependiendo de donde viváis, tendremos que regarlo todos los días.

Recordar, que la mejor hora para regar nuestras plantas, es la primera del día o la última de la tarde, nunca cuando a la planta le llegan los rayos del sol, si la mojamos, las gotas de agua harían la función de pequeñas lupas que podrían quemar la planta.

Para cortarlo, lo mejor es cortar los tallos desde la base, de fuera hacia dentro, así no dañamos la planta y tendría que seguir creciendo.

Cuando las hojas empiecen a amarillear, las retiraremos para darle mas vigor a los otros tallos.

Si bien, es una planta bianual, lo más aconsejado, según lo que he estado leyendo, sería comprar una mata de perejil, cada temporada. Por mi parte, intentaré que la próxima que ponga en la cocina me dure más de una estación, ya veremos....